sábado, 30 de noviembre de 2013

In the mood for Xmas

¿Nos vamos preparando para Navidad, o qué? Porque, como bien sabréis, la Navidad es un estado de ánimo...o más bien, hay que estar predispuesto a tener un estado de ánimo para poder disfrutarlas.

Ya os cuento que a mí es una época que me gusta; y si consigo viajar al extranjero y ver otras decoraciones y mercadillos aún más. Que le voy a hacer. Me gusta celebrar el solsticio de invierno: por fin dejamos atrás los días oscuros -con frío pero sin nieve- en los que sufrimos continuamente porque los días cada vez son más cortos.

 En Navidad todo se da la vuelta: los días se irán alargando minuto a minuto, empezamos a ver los primeros síntomas de la primavera, silenciosamente, y por qué no; cambiamos de año, de número...y yo hasta de edad, porque como me suele costar llevar los cálculos de los años que tengo el 1 de enero empiezo a practicar con mi nueva cifra. Que luego no los cumplo hasta que vuelven las cigüeñas,¡pues qué más da!

Voy a ir empezando a poner luces, brillos y colores, que me recuerdan cuan pronto llegará el buen tiempo y qué poco hace falta, estéticamente, para ser feliz. A comer speculaas, chocolate caliente, galletas de jengibre y a probar otros muchos sabores que me recuerdan la alegría de viajar y probar cosas nuevas. Voy a cantar villancicos aunque sea sola, y a llevar calcetines de renos y muñecos de nieve. Voy a decidir disfrutar de la temporada.

Peeeeero para todo eso hay que entrenarse, claro. Ponerse a tono. ¿Y cómo lo hago? Os cuento mis cuatro trucos cinematográficos para estar lista y con un nivel de ternura estupendísimo. Cuatro películas que me veo TODOS los años y que os recomiendo con locura:

En el number 4 está Bridget Jones´s Diary, una señorita con la que comparto edad y un futuro laboral un tanto incierto...entre otras cosillas variadas.

Empieza  en Navidad, of course, para ir poniéndonos a tono, y (como no me creo que no la hayáis visto) os recuerdo que con puntazos familiares de los más hilarantes: ese modelito que parece hecho con cortinas, ese refinamiento que son los pepinillos en vinagre con palillo...y ese Colin Firth que no nos puede caer mal ni parecer feo ni queriendo, para que nos vamos a engañar.

A partir de aquí viene un año lleno de cambios, de locuras, de momentos inesperados...y mucha mucha nieve, y mucho mucho amor...y sobre todo, mucha mucha comedia.

¿Qué nos gusta de ella? Está en ese momento decisivo, de cambio, donde decide ser valiente y empezar: empezar de nuevo, empezar cosas nuevas. Y sobre todo empezar a valorarse "Just as she is".

Soy además fan total de la banda sonora, de esas que, ta chán ta chán, ¡te compras original! Eso si que es amor...





En el number 3 esta The Family Stone. Esta tiene un tono un tanto más dramático, pero es también muy entrañable. Aunque tiene un tono coral y diría que todos los actores están magníficos, destacan Sarah Jessica Parker y Diane Keaton.

Esta película me conquistó nada más empezar por los exteriores: un pueblito de la costa norte de Estados Unidos ideal de la muerte: su casita, su nieve, su Inn: vamos, de postal.  Y también habla de un cambio: el de una mujer un tanto exigente y estirada que va a conocer a la familia de su prometido. La pasará de todo -y con todos-, pero también se irá descubriendo a sí misma y recuperando el sentido de la Familia. ¿Navideña o qué? ¡Vedla, que sí, que se llora igual que se rie! (Bueno, se rie un poco más, pero es que cuando se llora....)





Y llegando casi casi a la cima, en el número 2 está The Holiday, con la casa de mis sueños. Y no, no es la magnífica mansión de los Angeles, si no ese cottage taaaaaaaaaaaaaaan estupendísimo en Inglaterra. ¡OMG! Solo le falta un gato para ser perfecto, ya os lo digo.

Entre otros aparece la estupenda Kate Winslet, y es una vuelta de tuerca más a Bridget. Las Navidades vuelven a ser esas fechas destacadas en las que tomar el toro por los cuernos y decidirse a hacer algo nuevo. Ya sabes "si quieres que algo cambie, no hagas siempre lo mismo".

Aunque el entorno campiña inglesa me tiene totalmente enamorada, la verdad es que, lo que más me gusta de la película, es el vecino guionista de Los Ángeles. Ambos detectan lo que le falta al otro, desarrollando una amistad de los más entrañable. Ella le vuelve a abrir al mundo mientras que él, disimuladamente, la hace ver películas de mujeres fuertes, con valor, protagonistas de sus propias vidas. ¡Cineterapia de la buena!




Y en el número 1 la más mejor so ever: Love Actually. ¿Sí o qué?

Por favor, absolutamente magnífica. La he visto tantas veces que ya tengo el DVD cascado y me tengo que comprar una nueva...

¿Por dónde empezar? Las comedias corales me encantan, por ejemplo. Se entrelazan los personajes y sus historias, y esa sensación de que cualquier cosa que hacemos afecta a los demás, y viceversa, es algo fantástico. Además tiene historias, bueno, muy especiales: soy fan de Sarah y Karl. Esa escena de alegría total en la escalera me parece...vamos, el resumen visual de una emoción de manera perfecta.

La película es muy muy romántica; muy muy divertida y muy muy navideña. Y con una banda sonora muy buena. Tiene unos puntos, bueno, que no sabría por donde empezar: el videoclip navideño del abuelo, el momentazo Mr.Bean, la conversación con el niño en medio disfrazado de pulpo. Y esa parte de "niños, no compréis drogas. Haceros estrellas del rock Y OS LAS DARÁN GRATIS!. Por favor....

Es la que primero veo toooooooodos los años y me sigue gustando como el primer día. Si aún no la habéis visto: de verdad, sin falta. A mi ahora me ha dado mono, así que me pongo pero ya.

Porque: Love, actually, is all around.



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